Fuente Natural de Vitaminas A y D
Fuente Natural de Vitaminas A y D
Código: 5308
Código: 5308
Aceite de hígado de bacalao GOLD FISH
Se extrae de los hígados, convenientemente preparados, de varias especies de Gadus, especialmente G. morrhuae L, especie que vive en los mares del Norte y accidentalmente en el Cantábrico español. Únicamente el aceite de hígado de bacalao extraído es la fuente natural más importante de vitaminas A y D. No obstante el sabor de dicho aceite resulta bastante desagradable a pesar de los innumerables esfuerzos que se han hecho para intentar mejorarlo sin perjudicar su valor nutricional.
Composición del aceite de hígado de bacalao Es evidente la importancia nutricional del aceite de hígado de bacalao como fuente natural idónea, más concentrada, de las vitaminas A y D, de una forma directamente asimilable. La proporción porcentual entre las dos vitaminas es un factor decisivo en los procesos de calcificación ósea y crecimiento del ser humano. Cualquier desequilibrio entre la proporción de las dos vitaminas repercute desfavorablemente en la formación ósea de los niños e incluso, contra lo que generalmente se cree, en la fragilidad de los huesos de las extremidades inferiores de las personas ancianas por descalcificación senil.
El aceite de hígado de bacalao contiene aprox por 100 gramos: 100.000 – 120.000 U.I de Vitamina A 213 ug (0,025 ug 1U.I.) 10000 – 12.000 UI de Vitamina D
Propiedades de aceite de hígado de bacalao
Suplemento que aporta vitamina A y D de origen natural.
Favorece la calcificación ósea
Un sistema nervioso más saludable
Mejora la visión por su composición de vitamina A
Acción protectora sobre la piel por su composición de vitamina A.
Mejora las mucosas internas y externas
Mejora la elaboración de enzima del hígado
Propiedades antiinfecciosas.
Interviene en la formación de la progesterona (vitamina A)
Favorece la fijación del calcio y fósforo (vitamina D)
Menos cáncer, especialmente de mama, ovario y colon según un estudio en 2005 de investigadores de la Universidad de California.
Se ha descubierto que los esquimales presentan niveles inferiores de lipoproteínas de baja densidad (LDL) y niveles superiores de lipoproteínas de alta densidad (HDL). Se considera que los ácidos grasos de los aceites de pescado que consumen los esquimales constituyen la razón por la que éstos pueden comer una dieta tan abundante en grasas y, sin embargo, tener el corazón sano.
El aceite de hígado de bacalao proporciona los ácidos grasos de la serie Omega 3, (EPA y DHA) además de las vitaminas que mantienen el crecimiento normal y el cabello, la piel y las uñas saludables. Los adultos y también los adolescentes que basan su dieta en comida rápida, aquéllos que están atados a la casa y reciben poco sol y los niños en período de crecimiento se encuentran entre las personas a las que les favorecería tomar este suplemento. El ácido docosahexaenoico (DHA) y el Ácido eicosapentaenoico (EPA) son ácidos grasos omega-3 de cadena larga. el EPA es precursor del DHA, los dos son los ácidos grasos poliinsaturados que se encuentran en mayor concentración en el tejido nervioso. El EPA participa en el buen funcionamiento y buena comunicación de las células, especialmente a nivel del sistema nervioso. También parece colaborar en una buena circulación cerebral. El DHA tiene un importante rol en la formación y en la función del sistema nervioso, particularmente en el cerebro. Su mecanismo de acción aún no está totalmente dilucidado pero se propone que actuaría a nivel de las membranas celulares regulando sus funciones metabólicas y también a nivel de la expresión de genes relacionados con la función cerebral. Se ha correlacionado el contenido cerebral de DHA con la capacidad de aprendizaje y con el nivel de inteligencia de los recién nacidos y lactantes. El DHA, formado a partir de su precursor, proveniente de la dieta, o desde las reservas en los tejidos, es aportado por la madre al feto durante el período gestacional (del embarazo) y a través de la leche durante la lactancia. Se ha sugerido la necesidad de suplementar a la madre con DHA y EPA durante el período gestacional, e incluso antes de este, para asegurar el adecuado aporte del ácido graso para el normal desarrollo del cerebro del niño. La suplementación se puede realizar a través de aceites con alto contenido de EPA y DHA.
Aceite de hígado de bacalao GOLD FISH
Se extrae de los hígados, convenientemente preparados, de varias especies de Gadus, especialmente G. morrhuae L, especie que vive en los mares del Norte y accidentalmente en el Cantábrico español. Únicamente el aceite de hígado de bacalao extraído es la fuente natural más importante de vitaminas A y D. No obstante el sabor de dicho aceite resulta bastante desagradable a pesar de los innumerables esfuerzos que se han hecho para intentar mejorarlo sin perjudicar su valor nutricional.
Composición del aceite de hígado de bacalao Es evidente la importancia nutricional del aceite de hígado de bacalao como fuente natural idónea, más concentrada, de las vitaminas A y D, de una forma directamente asimilable. La proporción porcentual entre las dos vitaminas es un factor decisivo en los procesos de calcificación ósea y crecimiento del ser humano. Cualquier desequilibrio entre la proporción de las dos vitaminas repercute desfavorablemente en la formación ósea de los niños e incluso, contra lo que generalmente se cree, en la fragilidad de los huesos de las extremidades inferiores de las personas ancianas por descalcificación senil.
El aceite de hígado de bacalao contiene aprox por 100 gramos: 100.000 – 120.000 U.I de Vitamina A 213 ug (0,025 ug 1U.I.) 10000 – 12.000 UI de Vitamina D
Propiedades de aceite de hígado de bacalao
Suplemento que aporta vitamina A y D de origen natural.
Favorece la calcificación ósea
Un sistema nervioso más saludable
Mejora la visión por su composición de vitamina A
Acción protectora sobre la piel por su composición de vitamina A.
Mejora las mucosas internas y externas
Mejora la elaboración de enzima del hígado
Propiedades antiinfecciosas.
Interviene en la formación de la progesterona (vitamina A)
Favorece la fijación del calcio y fósforo (vitamina D)
Menos cáncer, especialmente de mama, ovario y colon según un estudio en 2005 de investigadores de la Universidad de California.
Se ha descubierto que los esquimales presentan niveles inferiores de lipoproteínas de baja densidad (LDL) y niveles superiores de lipoproteínas de alta densidad (HDL). Se considera que los ácidos grasos de los aceites de pescado que consumen los esquimales constituyen la razón por la que éstos pueden comer una dieta tan abundante en grasas y, sin embargo, tener el corazón sano.
El aceite de hígado de bacalao proporciona los ácidos grasos de la serie Omega 3, (EPA y DHA) además de las vitaminas que mantienen el crecimiento normal y el cabello, la piel y las uñas saludables. Los adultos y también los adolescentes que basan su dieta en comida rápida, aquéllos que están atados a la casa y reciben poco sol y los niños en período de crecimiento se encuentran entre las personas a las que les favorecería tomar este suplemento. El ácido docosahexaenoico (DHA) y el Ácido eicosapentaenoico (EPA) son ácidos grasos omega-3 de cadena larga. el EPA es precursor del DHA, los dos son los ácidos grasos poliinsaturados que se encuentran en mayor concentración en el tejido nervioso. El EPA participa en el buen funcionamiento y buena comunicación de las células, especialmente a nivel del sistema nervioso. También parece colaborar en una buena circulación cerebral. El DHA tiene un importante rol en la formación y en la función del sistema nervioso, particularmente en el cerebro. Su mecanismo de acción aún no está totalmente dilucidado pero se propone que actuaría a nivel de las membranas celulares regulando sus funciones metabólicas y también a nivel de la expresión de genes relacionados con la función cerebral. Se ha correlacionado el contenido cerebral de DHA con la capacidad de aprendizaje y con el nivel de inteligencia de los recién nacidos y lactantes. El DHA, formado a partir de su precursor, proveniente de la dieta, o desde las reservas en los tejidos, es aportado por la madre al feto durante el período gestacional (del embarazo) y a través de la leche durante la lactancia. Se ha sugerido la necesidad de suplementar a la madre con DHA y EPA durante el período gestacional, e incluso antes de este, para asegurar el adecuado aporte del ácido graso para el normal desarrollo del cerebro del niño. La suplementación se puede realizar a través de aceites con alto contenido de EPA y DHA.
-10% EXTRA ACUMULABLE EN TODOS LOS TÉS #MayoMesDelTé
Fuente Natural de Vitaminas A y D